La mejor rutina de cuidado de la piel en hombres
Todos merecemos una piel increíble, pero este consejo de cuidado personal suele pasarse por alto. Si necesitas ayuda para evitar que tu piel se seque, presente picazón, se arrugue o se vuelva grasa, el cuidado de la piel es un excelente lugar para comenzar. También puede ayudar a mejorar el aspecto (y el aroma) de la barba.
El truco es formar algunos hábitos sólidos que puedas mantener todos los días. Estos son algunos consejos clave para comenzar.
¿Cuál es tu tipo de piel?
¿Normal, grasa, sensible? ¿Una combinación de tipos diferentes? Al cuidar la piel, piensa en tu tipo de piel. La manera más fácil de saber esto es lavarse el rostro primero y luego ver cómo se seca la piel.
- Usa un jabón o limpiador suave para el rostro, luego sécalo dando golpecitos con una toalla suave.
- A continuación, dale a tu rostro aproximadamente media hora para respirar.
- Regresa al baño y mírate en el espejo: ¿qué ves?
GRASA: Si tu rostro está brillante en las mejillas, frente y nariz, probablemente tengas piel grasosa. También podrías tener granos con más frecuencia. Para este tipo de piel, la exfoliación es clave para limpiar los poros obstruidos. Esta es nuestra guía para afeitarte si tienes acné.
SECA: Si tu piel luce escamosa en algunas zonas, y se siente tensa, probablemente tengas piel seca. El humectante será tu mejor amigo para mantener la piel hidratada.
MIXTA: Si descubres que tienes una combinación de los dos tipos mencionados anteriormente, puede que tengas piel mixta. Ten en cuenta los productos adecuados para todo tipo de piel.
SENSIBLE: Si tu piel se siente especialmente tensa, o parece enrojecida, puede que tengas piel sensible. Recomendaríamos productos sin alcohol, tintes ni fragancias. Si necesitas ayuda para afeitarte con este tipo de piel, tenemos consejos.
NORMAL: Si no tienes ninguna de estas características después de lavarte la cara, tienes suerte: probablemente, tengas piel normal. Tu rutina puede ser bastante simple, y la mayoría de los productos pueden ser adecuados.
Ahora que conoces tu tipo de piel, asegúrate de encontrar un jabón o limpiador para el rostro adecuado para ti. La mayoría de los productos indican para qué tipo de piel funcionan mejor. Algunos limpiadores están diseñados para limpiar tu rostro y tu barba en uno, mientras que otros están formulados pensando en la piel sensible.
Cómo lavarse el rostro
Nuestro consejo básico es lavarse la cara dos veces al día. Generalmente, una vez por la mañana, inmediatamente después de despertarte, y otra vez por la noche, antes de irte a dormir. Para quienes tienen piel supersensible, es recomendable lavarse la cara solo una vez al día. Si te afeitas todos los días, eso significa que puedes incluir este paso como parte de tu rutina de afeitado diaria, antes de aplicar una preparación para afeitarse.
Estos son siete simples pasos para lavarse el rostro.
Paso 1: Lávate las manos.
Paso 2: Coloca las manos bajo el agua tibia y moja toda tu cara.
Paso 3: Usa una pequeña cantidad de shampoo o limpiador para el rostro en la palma de la mano y frota tus manos para que se forme espuma.
Paso 4: Aplica el producto en toda la cara, moviendo las manos en círculos. No presiones demasiado y procura que el limpiador facial no entre en tus ojos.
Paso 5: Enjuaga tu rostro hasta que no queden rastros de jabón facial.
Paso 6: Sécate la piel con una toalla suave y limpia.
Paso 7: Usa un humectante en todo el rostro, restregándolo como si usaras protector solar. Una pequeña cantidad es suficiente.
¿Qué es la exfoliación?
Un exfoliante es básicamente un producto cremoso o similar a un gel con una especie de arenilla. La exfoliación es especialmente beneficiosa para las personas con piel grasa, ya que ayuda a que penetre profundamente en los poros y limpia bien la piel, eliminando piel muerta y residuos.
Es bastante simple hacer un exfoliante con ingredientes que ya podrías tener en tu casa, como azúcar morena, miel, bicarbonato de sodio, avena, canela, aloe vera o aceite de árbol de té. Busca recetas en Google y recuerda no usar nunca un exfoliante corporal en el rostro. Tu rostro necesitará una fórmula para piel más sensible.
Consejo para afeitarse: Después de que la piel esté limpia, usa un exfoliante antes de afeitarte para un afeitado más suave y al ras. Este paso funciona bien no solo para el rostro sino también para otras partes del cuerpo.
Nunca omitas el protector solar
Considera seriamente hacer que el FPS sea parte de tu rutina de cuidado de la piel. Muchos humectantes tienen cierta cantidad de FPS. El FPS 15 es el mínimo según la FDA, pero la Academia Estadounidense de Dermatología recomienda al menos FPS 30 para todos los tipos y tonos de piel. De esa manera, puedes ayudar a mantener la piel segura contra las quemaduras solares, arrugas y problemas cutáneos graves. También ayuda a prevenir las manchas marrones y otros tipos de cambios de color. Si estás mucho al aire libre, piensa en obtener un FPS más alto para tu rostro y siempre sigue las instrucciones.
La constancia es clave aquí, y si seguir estos pasos parece demasiado, tómatelo con calma. Comienza integrando uno o dos a tu rutina diaria y continúa desde allí. Puede que no veas resultados de inmediato, pero a la larga, agradecerás haberte tomado el tiempo de cuidar tu rostro.
Obtén más consejos para perfeccionar tu rutina de afeitado y otros recursos útiles.
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